CARACAS HOY
- Paco Murillo Font
- 18 sept 2017
- 1 Min. de lectura
Carcas muere de hambre,
también sin medicina
sus almas enmudecen
cayendo de rodillas,
suplican perdón al cielo
sin saber cuando pecaron
y las rotulas lloran
asfalto sangrado
La muerte asecha risueña
aprecia el desangrado,
el pueblo pide paz
le dan mal encontrado
La ciudad sufre la peste
del gobierno desalmado
aferrado a su godarria
ignora ser despreciado
Las mariposas todas
pululan desairadas,
mueren en las esquinas
de odio y dolor maniatadas
Les recortan las alas
tijeras militares,
les roban la alegría
de sus dioses ancestrales
Edificios habanizados
se derruen bajo el sol
como cascarones secos
quebrados cual frágil crisol
Caracas, ciudad sin culpa
coreanizada militarmente
con tóxicos desfiles militantes
no puede ocultar, es imposible
sus muchos indigentes
hurgando gratuitos basurales
en procura de alimentos
a calmar la urbana hambruna
que sin rubor, ni pena alguna
disfrazan los rojos con premura
Nomenclatura que atrapa el anima
de la Sultana del Ávila, verde
practicando a seres indebidos
maniatando citadinos rebeldes
Sigue siendo la Sucursal del Cielo
recibe cadáveres a diario
de los crímenes impunes
y la represión como ideario
Desde el amanecer, tratan
de mostrar la maduriana
pero su cielo abierto y su descaro
condena los deseos del tirano
Caracas hoy, afectada de atraso
reprimida de paz en el día,
agobiada e insegura de noche
no disfruta de tu prístina alegría
Caracas hoy mal querida
llorosa, triste y harapienta
simulas humilde cenicienta
¿hasta cuando irredenta?
En tanto atempera la borrasca
ciudad fortaleza irreductible,
paridora de seres valientes
que ni se rinden, ni se venden
caminaras sobre la desventura
con sueños y profecías seguras
servidos por la providencia





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