LAS REMESAS EXPATRIADAS
- Paco Murillo Font
- 12 feb 2018
- 1 Min. de lectura
El mandón cada día dá
nueva y mayores sorpresas,
quiere aprovechar al exilio
para obtener más divisas
Como se desplomó el petróleo
y se colocó muy barato,
sin pena ajena ninguna
desea disfrazar el maltrato
Haciéndose siempre el loco,
silbándole al ”pajarito”
a la diáspora humillada
cínico le lanza un grito
A estas alturas del juego
y sin pedir perdón,
solicita a los de lejos
darle tremendo auxilión
Que le manden las divisas
en remesa familiar,
ya no tiene tantos dólares
para las deudas pagar
Habla de los exiliados
como si no pasara nada
y él no fuera gran culpable
de tan penosa escapada
Pero sí conoce bien
que la gente alejada,
llora por sus familias
sufrientes y abandonadas
Y por tal razón querrán
ayudar padres y hermanos,
sin dudar del sacrificio
les arrimarán las manos
Paro mas cínico aún
se transforma en inhumano,
obligando a las divisas
beneficiar al gobierno
Seguro se cumplirá
la maldad premeditada,
el mandón conteste está, que la familia
lejana, ayudará angustiada
Y para tal socavón
de las arcas personales
aplicar al “dicom” ordena,
para robarles los reales
La Patria ayer de todos
ahora es de unos pocos,
fue transformada en trastienda
de los comerciantes rojos
Se apropiaron de la misma
como botín de pirata,
navegando en corrupción
celebran la fiesta fausta
Desplumando a expatriados
continuarán con la orgía,
el mandón con su sarcasmo
les arranca plata y alegría





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